Si alguna vez te has preguntado cómo se logran esos amplios cultivos de cannabis con inmensas plantas que forman un mar verde, mientras tú tienes una sola planta recibiendo sol desde tu ventana, aquí te contaremos qué pasos puedes seguir para cultivar cannabis en exterior y no morir en el intento. Lo primero que debes saber es que cultivar al aire libre trae consigo muchas ventajas, pero también algunos problemas. Como en cualquier otro cultivo, al estar en el exterior las condiciones de luz, humedad, viento y temperatura las dará la propia naturaleza y así, además de cultivar un cannabis más natural, ahorrarás grandes costos. Pero esto también implica realizar acciones preventivas o a veces de último minuto para proteger tu cultivo de esas mismas condiciones naturales que puede que no sean las más aptas para tu cultivo en un momento determinado.
Sabiendo entonces a qué te puedes enfrentar, te contamos entonces lo que debes saber para cultivar cannabis en exterior. Primero que todo, la semilla. Sin una buena semilla no tendrás buena cosecha. Así que revisa bien toda la información que puedas conseguir y aprende qué variedad se adapta mejor al lugar donde vayas a plantar, en especial por la temperatura. En general, el cannabis es de clima caliente, pero unas tienen un espectro de baja temperatura más amplio, así que saber esto te dará la posibilidad de ir a la fija para tu cultivo. Con esto definido, es vital que sepas que la siembra debes hacerla en verano, cuando las temperatura es más alta y cuando el sol está afuera por más horas cada día.
Una vez tengas definida tu variedad y el momento en que deseas plantar, ahora debes elegir el lugar. Lo principal es que sea un punto donde reciba, por lo menos, cinco horas de luz del sol directa todos los días. Ahora sí, a sembrar.
Pensarás que aquí es solo salir y poner las semillas en la tierra, pero no. Las semillas son muy delicadas para ponerlas en un entorno tan libre. Lo ideal es que primero las germines en un ambiente controlado en pequeñas macetas y en cuanto ya sean unas pequeñas plantas, hacer el trasplante.
Para cada planta, debes cavar un hoyo de un metro cuadrado el cual debes rellenar con tierra de calidad, abonos y nutrientes, es decir, no puede ser con la misma tierra que sacaste.
En este momento, ya tienes tu cultivo. Pero no todo queda ahí. Como explicamos al principio, las condiciones naturales que hay cuando se cultiva cannabis en exterior a veces pueden ser adversas y la abundancia de ‘bichos’ puede afectar tu cultivo. Para esto, debes hacer varias cosas. Mientras tus plantas están pequeñas, es una buena opción ponerles una pequeña cerca, puede ser con malla, que aleje a animales grandes. Y una vez vayan creciendo, debes poner atención a los insectos que ponen en riesgo su salud, como la araña roja y la mosca blanca, las cuales ponen en riesgo cogollos y hojas respectivamente.
Finalmente, la recomendación es que cuides tu cultivo con mucho cariño; lleva de vez en cuando abono y puedes hacer en el mismo lugar un dispositivo para recoger agua lluvia y que sea más fácil regarlas y poda las plantas para que no crezcan desmedidamente.
Ahora ya tienes toda la información necesaria para cultivar cannabis en exterior.